Una contraseña debe ser fuerte, con un mínimo de 8 caracteres y estar compuesta por:
– Mayúsculas (A, B, C…)
– Números (1, 2, 3…)
– Minúsculas (a, b, c…)
– Caracteres especiales ($, &, #…)
Es importante utilizar contraseñas que no sean fáciles de adivinar. Por ejemplo: “123456789”, “qwerty”, “aaaaa”, nombres propios, cumpleaños, etc.